La Gastronomía panameña sabe a sazón afroantillano y todo lo debemos a la herencia que obtuvimos de las migraciones durante la construcción de canal y el ferrocarril.
El corazón se nos hace grande y se nos ata un nudo en la garganta de la alegría que sentimos de formar parte de esta bella cultura y a ver crecido con sus sabores.
En esta ocasión nos complace compartir con ustedes retazos de nuestra historia gastronómica afroantillana.
Es preciso retroceder a la llegada de los primeros trabajadores de la construcción del ferrocarril, los antillanos procedentes de Jamaica, Barbados, Guadalupe y otras islas. Luego, a las nuevas migraciones que aumentaron la mano de obra de la construcción del Canal interoceánico, bajo la gestión de los Estados Unidos.
Pero los afroantillanos no eran los únicos trabajadores de origen africano en el istmo. Los primeros llegaron a América por medio de la esclavitud colonial y sus descendientes recibieron el nombre de afrocoloniales. Se diferenciaban de los antillanos porque hablaban español y eran católicos.
Además de Bocas del Toro, los antillanos se repartieron entre la provincia de Colón y la ciudad de Panamá, específicamente en las zonas de Río Abajo, el popular barrio de El Chorrillo y Parque
Lefevre.
De esa mezcla y oleadas migratorias se origina el repertorio de sabores que hoy por hoy podemos disfrutar.
En la Actualidad la comida afroantillana es muy popular y reconocida. Entre sus platos encontrarás muchas opciones donde los productos del mar son los protagonistas, conjugados con el amplio uso de las especias como lo es el tan gustado curry. Los platos elaborados a base de mariscos también son muy disfrutados y forman parte de la dieta predilecta del panameño.
El picante es también un producto muy utilizado en la cocina afroantillana es un ingrediente clave, todo sabe mejor con picante. La cantidad de ají que se utilice determinará qué tan fuerte sea este. Lo ideal, según explican los expertos, es que el picante no sea tan invasivo en el paladar y que pueda ser degustado por cualquiera.
La mezcla de sabores en el paladar de quien come es lo que distingue a la comida afroantillana, es la que la hace sentir tan viva.
Otro producto estrella que no puede faltar es el coco, muy utilizado en platillos como El One Pot o “paella afroantillana” con arroz, coco y camarones secos.
Originalmente los esclavos lo preparaban con los sobrantes de la comida.
Entre más platillos tenemos el pescado al escabeche o al scobich, Saus un plato emblemático de la gastronomía caribeña, el bacalao antillano y el rondó.
El abanico de platillos es casi infinito que no terminaríamos de mencionarlos, pero que prometen dejarnos con ganas de más.
Es imposible no sentirse orgullos de la abundancia y rica gastronomía que nos ha heredado nuestros antepasados y que conforman la identidad culinaria del país.
Espero que hayas disfrutado como nosotros de este pequeño recorrido de nuestra herencia gastronómica afroantillana, te invitamos a conocer más de los orígenes de nuestra comida en el siguiente enlace
Hasta próxima mis curiosos.
Fuente:https://panamericanworld.com/revista/viajes-y-cultura/gastronomia-afropanamena/ - google_vignette
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